Imaginar un acto político, lleno de personajes de la vida económica y política de un área grande, todos con sus consabidos , coches oficiales, relojes de marca y la mayoría en primera fila con su nombre puesto en las primeras filas , reservado para que nadie le ocupe la silla del privilegio. Todos a priori parecen iguales, traje oscuro, quizás le podríamos denominar formal, corbata al gusto sin pasarse de la raya, ¡nunca mejor dicho! y los zapatos, hay ... los zapatos, la mayoría negros, sucios los de los que no han venido en coche oficial hasta la puerta, los demás llenos de.... y algunos blancos, no impolutos pero rompiéndome la armonía de la foto unos zapatos blancos en primera linea.
No hay comentarios:
Publicar un comentario